A dos horas de Sidney en tren dirección Newcastle, se encuentra el Morisset Park.
Una experiencia única el venir a este parque y verte rodeada de estos divertidos saltimbanquis.
Al principio da un poco de rollo porque se aproximan a ti saltando en grupo pero pronto te das cuenta que no son nada ariscos, les ofreces comida que aceptan encantados (sobre todo plátanos y pan).
Para que sirva de precedente, las zanahorias pensé que no les gustaban porque no las hicieron ni caso, pero claro... a mí me dijeron que había que cortarlas en trozos pequeños y yo las partí en 2 o 3 cachos... Cuando decían pequeños, decían realmente trocitos pequeños. Pequeño es una cualidad muy relativa cuando eres de Bilbao...
¡Ha sido una experiencia increíble! Me he emocionado muchísimo ¡me ha encantado! Como una niña, me parece que sigo con el síndrome esté de Peter Pan, pero ¿sabéis qué? ¡QUÉ ME HACE TREMENDAMENTE FELIZ! ¡Ha sido una experiencia maravillosa con los canguros!
Les he podido acariciar, dar de comer, sentarme en grupo con ellos, observarles lo curiosos que son estos marsupiales con sus crías en la bolsa y como asoman las patitas y la cabecita las crías desde la bolsa... ¡Súper guay!
Y pronto....
¡KOALAS!
Una experiencia única el venir a este parque y verte rodeada de estos divertidos saltimbanquis.
Al principio da un poco de rollo porque se aproximan a ti saltando en grupo pero pronto te das cuenta que no son nada ariscos, les ofreces comida que aceptan encantados (sobre todo plátanos y pan).
Para que sirva de precedente, las zanahorias pensé que no les gustaban porque no las hicieron ni caso, pero claro... a mí me dijeron que había que cortarlas en trozos pequeños y yo las partí en 2 o 3 cachos... Cuando decían pequeños, decían realmente trocitos pequeños. Pequeño es una cualidad muy relativa cuando eres de Bilbao...
¡Ha sido una experiencia increíble! Me he emocionado muchísimo ¡me ha encantado! Como una niña, me parece que sigo con el síndrome esté de Peter Pan, pero ¿sabéis qué? ¡QUÉ ME HACE TREMENDAMENTE FELIZ! ¡Ha sido una experiencia maravillosa con los canguros!
Les he podido acariciar, dar de comer, sentarme en grupo con ellos, observarles lo curiosos que son estos marsupiales con sus crías en la bolsa y como asoman las patitas y la cabecita las crías desde la bolsa... ¡Súper guay!
Y pronto....
¡KOALAS!
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